Alcalde condena cualquier actuación violenta en el marco de la movilización pacífica

“La movilización pacífica jamás debe incorporar actividad vandálica, saqueo, robo, agresión a la dignidad y a la vida porque se desdibuja y deslegitima y porque rompa las escuchas para la sociedad que necesita ser transformada”.

Con este enfático análisis el alcalde Jorge Iván Ospina condenó las intromisiones que al final de la jornada del 20 de julio se presentaron en pocos puntos de la ciudad, sobre todo en la Loma de la Cruz donde se concentraron las distintas movilizaciones de la ciudadanía.

Para e alcalde Ospina cualquier actividad violenta en el marco de la movilización pacífica debe ser condenada y controlada. “La protesta es un derecho constitucional que debe ser consagrado, respetado y permitidos. En ese sentido, la actividad de la Fuerza Pública no es el aniquilamiento de la movilización o protesta, por el contrario es su protección para que el ciudadano la ejerza de manera adecuada”, precisó el mandatario.

Al hacer un balance de la jornada, el burgomaestre caleño indicó que las grandes mayorías se manifestaron de forma tranquila y pacífica  e hicieron presencia en la denominada por los manifestantes “la Loma de la Dignidad” luego de partir de distintos circuitos de la ciudad, acompañados de actividades culturales, deportivas y artísticas.

Sin embargo, “un grupo de desadaptados pretendía cometer actos vandálicos y adelantar hechos violentos, lo que demandó la actuación del escuadrón de la Policía”, advirtió.

Calificó como desafortunado dado que la mayoría se encontraba compartiendo tranquilamente y en diálogo abierto y la jornada se vio perturbada. “Lo que está ocurriendo es un síntoma y la necesidad de transformación de todas las instituciones y se manifiesta en temas como la crisis ambiental, las dificultades de empleo, inclusión y educación”, concluyó.

Dentro del balance se destaca que no hubo muertos en desarrollo de las protestas pacíficas, tampoco daños a la propiedad privada ni pública. Se relacionan ocho policías con heridas leves y seis civiles. Durante la noche se recogieron los escombros para que la ciudad este miércoles amaneciera limpia y embellecida.

Anna María Castro Casas