‘ReconoSER: terrritorios de vida’: el paso a las segundas oportunidades de paz

“Antes teníamos armas, hoy tenemos un lapicero, un pincel, un libro” y cuánta razón tiene Carlos Eder Mina, un joven que hace algún tiempo hacía parte de un grupo delincuencial y hoy decidió transformar su proyecto de vida, ahora es quien fomenta las actividades de participación artística y deportiva en Potrero Grande.

Así como Carlos, hay muchos jóvenes en Cali que han cambiado las acciones violentas por dinámicas de paz y reconciliación, sin embargo, 25 de ellos quisieron llevarlo mucho más allá.

Luego de varios meses de preparación, junto a la Vicaría para la Reconciliación y la Paz de la Arquidiócesis de Cali, la Secretaría de Paz y Cultura Ciudadana, la Secretaría de Seguridad y Justicia y ACDI/VOCA – USAID, crearon ‘ReconoSER: territorios de vida’ una exposición museográfica, resignificando cada una de las acciones que anteriormente reflejaban la violencia.

¿Recuerdan haber visto alguna vez zapatos colgados en las cuerdas de energía en algún barrio de Cali?, estos, marcan una frontera o un lugar de expendio de estupefacientes, pero ¿puede cambiar esto? Sí.

“Si yo no me pongo en los zapatos de otra persona no voy a saber que está viviendo esa persona; en algunos territorios las personas desconocen las dinámicas que se ven, en los zapatos plasmamos lo que la mente y la boca callan, pero a través de ellos pudimos expresar lo que muchas personas teníamos reprimido, antes significaban algo negativo y nosotros lo convertimos en un hecho artístico” comenta Marcela Urrutia con orgullo, mientras enseña cada pincelada artística, cada sueño e idea de vida que quedará plasmada siempre en cada zapato y corazón después de ver esta exposición.

Objetos y fotografías de gran formato que representan algún momento significativo de los jóvenes, hacen parte también de esta exposición que enmarca un nuevo capitulo en la vida de los participantes, ese capítulo de la reconciliación, de las oportunidades y el cambio, del transformar su ser, como una una semilla, pequeña en tamaño pero que a futuro genera un gran árbol, que dará sombra, frutos, o flores, imagínense un bosque, y cada árbol plantado, significa las ganas y el querer transformar no solo una vida, sino un barrio, una comuna, una ciudad. Lindo, ¿no?

“Nosotros somo un espejo, el ejemplo de los niños, queremos demostrar que los valores no se han perdido, hay que recuperarlos. La violencia no deja nada, es mejor seguir adelante, por una Cali unida y sin fronteras” resaltó Carlos Eder Mina, joven participante de este proceso.

‘ReconoSER: territorios de vida’ estará abierta para el público este viernes 04 de octubre en la Casa Obeso.

Abran su corazón a la esperanza y a las segundas oportunidades para la paz.