La transparencia incluye el libre acceso a la información pública, a la vez que fortalece la democracia.

Es una necesidad recordar permanentemente que uno de los valores de la democracia, es precisamente la transparencia, de allí que la Ley de Transparencia y de Acceso a la Información sea trascendental en el fortalecimiento de nuestras instituciones. Esta es una nueva dimensión en la gestión de los recursos de interés público y en el relacionamiento del Estado con el ciudadano, dijo Ana Paulina Sabbagh, coordinadora del Grupo Ley de Transparencia de la Secretaría de Transparencia de la Presidencia de La República.

Sabbagh también dijo que “el acceso a la Información pública es  un derecho fundamental, equiparable con el derecho a la vida, nadie lo puede quitar.  Todos los ciudadanos tenemos derecho a la información pública, a la cual podemos acceder por diferentes medios: el portal electrónico, las redes sociales, solicitudes, entre otros, porque el  Estado tiene el deber comunicar.”

“La información es un bien jurídico, amparado por las Cortes internacionales. El derecho a la información pública se convierte así en un derecho que permite la entrada a otros derechos, por eso se le denomina un Derecho Llave.  Por ejemplo, permite al ciudadano conocer qué programas y subsidios oferta el Estado, en salud, educación, en especial para tomar mejores decisiones wque incluyen a poblaciones que se encuentran en condición de vulnerabilidad o mayor necesidad”, puntualizó la funcionaria.  

La información pública se convierte en poder para el ciudadano, a la vez que se convierte en una herramienta para que los gobiernos o entidades se legitimen y recobren la confianza perdida.

Colombia saldó una deuda con el ciudadano, por eso hoy cuenta con estándares internacionales altos de acceso a la información y se sitúa entre los 180 países que tienen normado este Derecho, expresado en la Ley 1712 de 2014.

Sabbah expresó que “nuestra misión es elevar la calidad de la democracia y esto se hace con transparencia, mayor legitimidad, mayor posibilidad de conocer en qué se están gastando los recursos, en los espacios para interpelar a la administración cuando sus acciones no son las apropiadas, en la rendición de cuentas, pues la información debe circular ampliamente.”

Finalmente expresó que “la corrupción se da en espacios de secretismo y obscuridad, se hace donde no hay luz, donde no hay información y en ese contexto,  una manera importante de quitarle peso a esa situación es la generación de procesos de publicidad, de información, de rendición de cuentas donde el ciudadano pueda conversar y participar porque está bien informado.  Por ello hay que crear condiciones para el relacionamiento con la ciudadanía, generar condiciones de transparencia, escenarios como esta Primera Jornada de Transparencia, por ejemplo”

¿Quiénes están obligados a informar?

Todas las ramas del poder público nacional, departamental y municipal, los órganos autónomos e independientes, el que preste un servicio público, quien administre recursos públicos, incluso los partidos políticos, están obligados a entregar información pública, en las condiciones que establece la norma;  como cualquier derecho tiene unos límites y los marca de manera en dos tipos de información: la información reservada y la clasificada. 

Play