Una comuna que tiene 10 en todo

La comuna 10 es el territorio de Cali en el que sus habitantes tienen más doctorados y maestrías, según las estadísticas que manejan la Universidad del Valle y el Icesi.

No en vano allí reside Ernesto Santacruz, autor del proyecto ‘La auto construcción de acueducto y alcantarillado con entrega de materiales en alianza estratégica’, reconocido por el Banco Mundial como el mejor proyecto de Colombia, en los años 90.

Su interés nació al ver el desmesurado crecimiento de la ciudad con el apogeo del Distrito de Aguablanca, por lo que inició jornadas y mingas con el padre Alfred Walker. Su idea de construir las redes de acueducto, alcantarillado y eléctricas con un sistema distinto al tradicional, fue acogida por la Fundación Carvajal, la Universidad del Valle y las Empresas Municipales de Cali -Emcali.

Allí se le despertó más ese espíritu comunitario y ya siendo empleado de Emcali diseñó la Unidad de Acción Comunitaria, hoy en día conocida como la Dirección de Responsabilidad Social, que tiene a su cargo la Gerencia General de la entidad.

Para no dejar morir sus memorias escribió el libro ‘Participación Social y Gestión Comunitaria: retos y perspectivas’ el cual entregó personalmente al alcalde de Cali, Jorge Iván Ospina, durante la jornada de Gobierno al barrio que se adelantó este jueves 15 de septiembre en el barrio El Guabal, de la comuna 10.

En la actualidad, Ernesto Santacruz ejerce sus funciones en la Personería Distrital de Santiago de Cali como capacitador en proyectos de participación ciudadana, juntas de acción comunal, juntas administradoras locales y presupuestos participativos.

En su obra hace un análisis crítico de la crisis de la participación ciudadana; cuestiona cómo se dejan permear los líderes por cuestiones políticas, chantajes y componendas e invita a reivindicar el concepto de que la gente puede organizarse y ser transparente, apoyando a las Juntas de Acción Comunal como base de la sociedad, alejándose de los vicios tradicionales.

“La participación ciudadana está despertando. Hay nuevos líderes que ya no piensan en el individualismo que los ha llevado a la crisis, aunque aún quedan quienes desechan la colectividad e impiden participar a los vecinos por temor a ser desplazados. Los nuevos valores deben tener una visión amplia del territorio”, destaca Santacruz.

“Carecemos de estudios técnicos para las necesidades de los barrios; no se hacen análisis a fondo para aportar desde las JAC al Plan de Desarrollo, sino que los diagnósticos se hacen a ojo. Por eso la academia debe acercarse a los territorios de una manera técnico social con la política pública. Y esa es una semillita que espero haber sembrado hoy en el Alcalde”, concluyó.

William López Arango.