La zarigüeya: un vecino nocturno en Santiago de Cali

La zarigüeya es un marsupial que se encuentra en diversas regiones de América, incluyendo Colombia. Se sienten a gusto en bosques, zonas de matorrales y áreas urbanas, siempre que puedan encontrar refugio y comida.

Santiago de Cali alberga una rica diversidad de fauna silvestre y una de las especies más encantadoras que podemos encontrar es la zarigüeya, científicamente conocida como Didelphis marsupialis.

Estas criaturas fascinantes se han convertido en un símbolo de conservación y biodiversidad en nuestro querido Parque Ambiental ‘Corazón de Pance’, donde han sido reubicadas por el equipo de Fauna Silvestre del Departamento Administrativo de Gestión del Medio Ambiente.

Son relativamente pequeñas, con una longitud corporal que oscila entre 30 y 50 centímetros, más una cola prensil que puede alcanzar otros 40. Tienen hábitos arbóreos y terrestres, lo que les permite explorar tanto el dosel forestal como el suelo.

Se trata de criaturas omnívoras, lo que significa que consumen una amplia variedad de alimentos, incluyendo frutas, insectos, pequeños vertebrados, carroña y, ocasionalmente, plantas. Este comportamiento alimenticio las convierte en importantes reguladoras del equilibrio ecológico.

Estos marsupiales tienen una estrategia de reproducción única: las crías nacen prematuramente y completan su desarrollo en una bolsa ventral de la madre. También tienen una cola prensil que les ayuda a trepar árboles y a mantener el equilibrio. Además, su aparente lento andar esconde su agilidad y destreza para trepar y escapar de depredadores.

Aunque algunas personas pueden confundirlas con ratas o roedores, las zarigüeyas desempeñan un papel importante. Su capacidad para dispersar semillas, controlar plagas de insectos y roedores y servir de alimento para aves rapaces, felinos y zorros, las convierte en contribuyentes valiosas en la salud de los ecosistemas locales.

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La expansión urbana en Cali y la invasión del hábitat de fauna silvestre, han hecho que las zarigüeyas sean más visibles en la ciudad. Pueden encontrarse en viviendas, empresas o conjuntos residenciales en busca de alimento o refugio. Esta especie puede terminar en lugares inusuales debido al desplazamiento humano.

Si te encuentras con una zarigüeya, lo mejor es observarla a distancia y no intentar tocarla. Si parece herida o en peligro, contacta a las autoridades locales encargadas de vida silvestre.

Medidas responsables para la conservación de zarigüeyas…

1. No molestarlas: si encuentras una zarigüeya en su hábitat natural, no la molestes ni persigas. Estas criaturas tienden a huir rápidamente cuando se sienten amenazadas.

2. Evitar alimentarlas: no es recomendable alimentar a las zarigüeyas, ya que esto puede alterar su comportamiento natural y dieta. Es importante que encuentren su propio alimento en su hábitat.

3. Reducir la velocidad al conducir: si ves una zarigüeya o cualquier otro animal silvestre cruzando la carretera, reduce la velocidad para evitar atropellos.

4. Comunicar sobre individuos heridos o en viviendas: si encuentras una zarigüeya herida o atrapada en una vivienda, comunícate inmediatamente con el Dagma.

5. Evitar la exposición de materia orgánica: controla la disposición inadecuada de residuos sólidos y evita dejar espacios como bodegas o similares, donde puedan residir zarigüeyas u otras especies silvestres.

6. Proteger la fauna silvestre: si encuentras una zarigüeya cerca de tu casa, comunícate con la Policía Ambiental o el Dagma para tomar las medidas adecuadas.

La zarigüeya es un tesoro natural de Santiago de Cali que debemos apreciar y proteger. Su presencia en el Parque Ambiental ‘Corazón de Pance’ es un testimonio de nuestro compromiso con la conservación de la biodiversidad local. Cuidemos de estas criaturas y de su hogar, para que futuras generaciones también puedan disfrutar su encanto y singularidad.