Corazón Contento

El programa busca garantizar el acceso a los alimentos para las poblaciones más vulnerables, en particular a aquellas personas que se encuentran en situación de pobreza extrema, a través de comedores comunitarios.
Estos son escenarios de encuentro donde además de alimento a las poblaciones en situación de hambre se incentiva y promueve la organización y desarrollo de las comunidades; son espacios para la reconstrucción del tejido social, donde se motiva el reconocimiento de habilidades y competencias de las/los gestores y las/los usuarios, posibilitando la formación de líderes para la comunidad.
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beneficiarios
Beneficiarios
- Las personas que no estén inscritas por los gestores de los comedores comunitarios en el momento de habilitar el comedor podrán seguir la siguiente ruta para acceder a sus servicios:
- Suministrar al programa los datos de ubicación de las personas sujetas de asistencia alimentaria.
- El programa se pondrá en contacto con los beneficiarios y les ubicará en el comedor más cercano a su lugar de rsidencia y les explicará el funcionamiento del comedor para su uso.
- Las personas beneficiarias podrán asistir al comedor seleccionado para atenderles de lunes a viernes, con su respectivo porta vianda, donde se les entregará una ración diaria, equivalente a 800 calorías, de acuerdo con el modelo establecido para los beneficiarios del programa como mínimo vital alimentario.
- Los beneficiarios podrán recibir, si así lo desean, acompañamiento psicosocial por parte de los equipos del programa.
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Datos de contacto
- Avenida 5AN No 20 - 08 Oficina 601. Subsecretaría de Poblaciones y Étnias
- Sede del Asociado, Comisión Arquidiocesana Vida, Justicia y Paz (carrera 17 # 31A - 14, barrio La Floresta, Parroquia San Pablo
- Lunes a viernes: 9:00 a.m. a 12:00 m. y de 2:00 p.m. a 5:00 p.m.
- (60+2)8896332
- (60+2)4103421
Así nacieron los comedores
El modelo de los comedores comunitarios en nuestra ciudad tiene su génesis en los esfuerzos en la arquidiócesis de Cali, liderada en ese entonces por el arzobispo Isaías Duarte Cancino, quien, a finales de los años 90, inició el programa bajo el nombre de Ollas Comunitarias.
En ese esfuerzo, las comunidades organizadas bajo el liderazgo de unos vecinos, avalados por las parroquias locales, apelaban al espíritu de solidaridad, para que, entre aportes en especie, dinero o en trabajo humano, juntaran lo necesario para una ola común, donde los más necesitados de la zona tuvieran garantizado el acceso a los alimentos.
La Arquidiócesis de Cali logró fortalecer más de 20 ollas comunitarias permanentes en los barrios más deprimidos de la ciudad, y acompañar esfuerzos en 20 más que, a pesar de ser “intermitentes”, lograban aportar esperanza y apoyo a las comunidades vulnerables.

Al observar el efecto positivo que esta acción de la Iglesia provocaba en las comunidades, en términos de convivencia, solidaridad y reducción de la violencia, la Alcaldía de Cali, a través de la entonces Asesoría de Paz, decidió aunar esfuerzo con la Arquidiócesis para fortalecer y profundizar este modelo, dándole estabilidad a la entrega de alimentos, así como las condiciones mínimas de equipos y menajes para que esta acción fuese permanente y, de esta manera, transformar las ollas comunitarias en comedores comunitarios.

Fue así, como en 2015 se generaron las acciones para apoyar 47 ollas y se destinaron los recursos para su continuidad en 2016, esfuerzo que recogió la Administración de Maurice Armitage, haciendo lo necesario para fortalecer sus capacidades en términos de accesibilidad a los alimentos, ampliación de la cobertura y profundización de la intervención psicosocial.
De esta manera, el trabajo conjunto entre Alcaldía, Arquidiócesis y comunidad hace posible que este programa siga avanzando en su objetivo de disminuir el hambre en la ciudad, al mismo tiempo en que fortalece los escenarios de construcción de tejido social.
Cifras de Corazón
Los comedores comunitarios son quizá una de las apuestas más importantes de la Administración caleña en la última década, así lo evidencia el hecho de que, pese al cambio de Gobierno en el Distrito, dos mandatarios locales, de diferentes corrientes y estilos de liderazgo, hayan coincidido en mantenerlos como una estrategia que no solo da resultados en la lucha contra el hambre, sino que, además, fortalece las dinámicas de solidaridad y participación comunitaria en los territorios.
Comedores habilitados
Del 2016 a la fecha, el programa ha tenido un crecimiento casi del 2000%. Comenzamos con 47 comedores comunitarios en 2016 que atendían 4.400 personas, al final del periodo del 2019 ya eran 100 y actualmente, tenemos una red de 762 comedores habilitados en todo el Distrito de Cali que benefician diariamente cerca de 85 mil personas.
Beneficiarios atendidos
El programa ha crecido como un alud, comenzó con menos de 100 gestoras y hoy en día hay 2.600 personas, de las cuales el 85% son mujeres que reciben, preparan y entregan los alimentos que la Secretaría de Bienestar Social adquiere para beneficiar a la población vulnerable.
Fecha de publicación 29/10/2022
Última modificación 28/08/2023