Extranjeros que entregan el alma por Colombia, su patria por adopción

Tres extranjeros compartieron sus historias de la llegada al país que los vio crecer como personas y como profesionales, mientras juraron respeto por su segunda patria y se hicieron ciudadanos por adopción en ceremonia presidida por la abogada María del Pilar Cano Sterling, directora del Departamento Administrativo de Gestión Jurídica Pública.

Germán Carlos de Laire Forttes es un chileno orgulloso de ser colombiano por adopción, quien siempre que tiene la oportunidad de contar cómo es Colombia no vacila en decir que es el país que le dio todo lo que tiene en su vida, “Mi padre nos trajo en el año 73 y después de todos estos años que Colombia me ha dado todo lo que tengo y lo que soy, quiero en agradecimiento devolverle ese inmenso favor a través de mis empresas, generando empleo”, expresó con certeza Germán.

Por otro lado, Sonia Margot Lozano Rodríguez asegura sentirse más colombiana que peruana, pues llegó a Colombia cuando tenía solo 12 años de edad, se profesionalizó y se casó en este país que lleva en su corazón y en su alma, “Yo soy más colombiana que peruana porque cuando voy a visitar a mi familia al Perú, no me puedo acostumbrar a estar tanto tiempo allá, tengo que venirme a mi país”, son las palabras de Sonia, mientras sonríe.

La tercera historia es la de Raquel Yrama Cano Herrera, una venezolana con más de 20 años de vivir en Colombia quien ama la brisa caleña y el pandebono en las mañanas para desayunar; considera que lo mejor para ella ha sido la familia que Colombia le dio y con quienes comparte su dedicación al cuidado del ambiente incentivando en sus hijas la importancia de la separación en la fuente.

Durante la pandemia estos tres extranjeros que hoy son colombianos por adopción, también se han convertido en guardianes de vida:

Germán: “Yo soy guardián de vida porque elaboro alcohol antiséptico para vender y para donar a quienes lo necesitan y no tienen cómo comprarlo”.

Sonia: “Mi familia y yo somos guardianes de vida porque entregamos a nuestros clientes todas las medidas de bioseguridad y regalamos tapabocas cada vez que nos hacen una compra”.

Raquel: “Nosotros somos muy ecológicos y siempre a mis hijas les he enseñado a cuidar el entorno en el que habitamos”.