La vía a Pance va por buen camino

“No veo la hora de subir a La Vorágine por un carril exclusivo para bicicletas y terminar con esta zozobra de estar mirando hacia atrás y tener que arrinconarme contra los árboles y el alambrado para que un vehículo me vaya a golpear”, dijo Leydi Garcés, estudiante de ingeniería en el Icesi, quien cada sábado y domingo en las mañanas sube desde Cali a Pance en su bicicleta.

Ante esta inquietud el ingeniero Marcial Quiñones, secretario de Infraestructura de la Alcaldía de Cali, manifestó que muy pronto ella y miles de caleños y turistas podrán disfrutar de un carril exclusivo para bicicletas al lado de un sendero peatonal para que ciclistas y peatones practiquen sin problemas sus deportes.

Según el ingeniero Quiñones, durante la visita de inspección realizada este fin de semana, se encontró que las obras van a muy buen ritmo y el avance de las mismas es satisfactorio, a pesar de los inconvenientes presentados.

“Mirando la obra nos encontramos que existe una entrada regulada de agua para los acueductos de Pance y es necesario hacerle un canal especial a modo de vox culvert, cuyos diseños ya fueron presentados al Dagma para su aprobación. Una vez se cumpla este requisito, procederemos a pavimentar el tramo para unir la vía que está pavimentada y entregar esos 1.5 kilómetros al servicio vehicular”, agregó Quiñones.

El sub secretario de Infraestructura, Octavio Ramírez, complementó diciendo que en aras de entregar una obra en perfectas condiciones se están estabilizando los taludes que presentan mucha verticalidad para evitar a futuro deslizamientos o derrumbes. Igualmente -anotó- se están ajustando los diseños geométricos a la altura de La Riverita para que a finales del año 2018 esta obra se le entregue a la comunidad.

Esta solución vial, que hace parte de las Megaobras, fue adjudicada al Consorcio Vía Pance ingenieros Amézquita, Naranjo y Fernando Castro, por 21 mil millones de pesos para intervenir 2.5 kilómetros de vía de los 5.1 kilómetros que tiene el proyecto, el cual inicia en la Curva del Bofe y termina en el puente de La Vorágine.

De allí que quienes pretendan viajar de Cali al pueblo de Pance se encontrarán que la vía por el callejón de Las Chuchas se vuelve lenta en la Curva del Bofe debido a las obras de infraestructura, pues deben continuar su marcha por la vía tradicional de 4.80 metros de ancho, la cual quedará convertida en ciclorruta una vez concluya la nueva calzada de 7.20 metros de ancho, que será de doble sentido.

Al lado de la ciclorruta, costado izquierdo, irá de manera alterna un sendero peatonal de 2.50 metros de ancho para que este se convierta en pista de trote o de caminatas para las personas que suben a hacer deporte; por lo que este tipo de solución vial no solo mejorará la movilidad en el sur de la ciudad, sino que fomentará el deporte y la recreación en la capital vallecaucana.

William López Arango