Cambios en las estaciones del MIO benefician a toda la comunidad

Incansable ha sido el trabajo de la Administración Distrital para recuperar la normalidad en el adecuado flujo de pasajeros del Sistema Masivo. En los próximos días se entregarán las estaciones de la Manzana del Saber y Tequendama, sobre la calle quinta, gracias a las intervenciones adelantadas conjuntamente con Metrocali.

Esta vía, que conecta el sur con el centro de la ciudad, es uno de los corredores más importantes, y la comunidad estaba pidiendo la reactivación de estas estaciones vandalizadas y saqueadas durante el estallido social del 28 de abril. La apertura al público de estas estaciones se anuncia para el 7 de febrero, al igual que la de Villacolombia.

Hoy, los líderes de las Juntas de Acción Comunal de los barrios afectados, en la calle quinta, adelantaron una inspección de las obras y recibieron con beneplácito las modificaciones.

“Muy acertados los cambios que se realizaron en la estación reemplazando los elementos que son factibles de robo o de agresiones, por otros de mayor resistencia. Invitamos a la comunidad a que cuidemos nuestras estaciones y que estemos pendientes de cualquier persona sospechosa. Porque el Mio es de nosotros los caleños”. Expresó Diego Guerrero, vecino de la estación Manzana del Saber.

Para el presidente de la comuna 19, Antonio Garzón, la falta de estas estaciones estaba obligando a los vecinos a caminar largos tramos para acceder al transporte público: “Es fácil para los jóvenes, pero hay gente con problemas de movilidad y ancianos que no ven la hora de que las abran”.

En esta segunda fase de recuperación se logró la intervención de la estructura metálica y el cerramiento, así como el cableado interno y el sistema de red. Las mallas de aluminio se reemplazaron por láminas de acero al carbón y, en general, las estructuras son más resistentes y seguras para los usuarios.

“Las cabinas se recuperaron y se reforzaron con mayor seguridad y dobles elementos de protección para el ingreso. Se recuperó lo que se pudo y se invirtió en una nueva estructura, se cambió el cerramiento de mallas de aluminio por acero al carbón. El sistema de soporte sufrió variaciones por seguridad, más resistentes y menos atractivo para robos” explicó Leonardo Polanco, arquitecto contratista de Metrocali.

Agregó el arquitecto, que los elementos de vidrio que hacían parte del cerramiento, tanto los horizontales como las puertas telescópicas se cambiaron por puertas enrollables y por tubular doble.

“Se recuperó parte del cable afectado, sin embargo, hubo que hacer cableado nuevo, iluminación nueva total y reponer la fibra óptica y restaurar los tableros y cometidas del cuarto eléctrico” insistió el profesional.

Las cabinas se reforzaron con dobles elementos metálicos para proteger su ingreso y custodiar el cerebro de la operación que beneficia a todos los caleños.

Carolina Tascón