Cali lleva atención psicosocial a las víctimas del conflicto a sus territorios

A través de un esquema móvil de atención y valoración psicosocial, la Alcaldía de Santiago de Cali por medio de la Secretaría de Bienestar Social, hace valoración a la condición de vulnerabilidad de las familias víctimas del conflicto armado asentadas en la capital del Valle.

Este trabajo, que se viene realizando por medio de la Subsecretaría de Atención Integral a Víctimas en articulación con el operador Corporación para el Desarrollo Social y Cultural del Valle del Cauca (Corpovalle), ha beneficiado a 400 personas, la mayoría ubicadas en la comuna 1, 14,15, 18 y 21 de la ciudad, lo que ha logrado descentralizar la atención en el Centro Regional de Atención a Víctimas, Crav.

“Una de las estrategias implementadas dentro de la Administración de Maurice Armitage es llevar la oferta de servicios a las comunas, donde se encuentra la población víctima en Cali. Es por esto que con este esquema móvil contamos con un equipo de profesionales, que llega a brindarles atención psicosocial como complemento de nuestro acompañamiento dentro de la ruta de atención a esta población que ha sufrido impactos psicosociales y daños en la salud física y mental”, manifestó Carolina Campo, secretaria de Bienestar Social.

Cali es la principal ciudad receptora del conflicto armado interno del suroccidente colombiano, la cual alberga 214.237 personas provenientes, en su mayoría, de Nariño, Cauca, Chocó. Es por esto que se crea la Subsecretaría de Atención Integral a Víctimas, que es la entidad de crear programas en pro del bienestar de esta población.

De acuerdo con el subsecretario de esta de pendencia, Diego Fernando Padilla, “con esta estrategia buscamos brindar acompañamiento de primera mano a las personas que han sido beneficiarias de la Ayuda Humanitaria Inmediata, garantizando la subsistencia mínima hasta el momento de la valoración e inclusión en el Registro Único de Víctimas, RUV. Además de generar jornadas psicosociales y de orientación en la ruta de atención, buscando velar y hacer seguimiento de las condiciones de vida de las personas que llegan a la ciudad”.

“El objetivo es mejorar la atención con datos reales del estado de las personas, no solo con diagnósticos realizados desde el escritorio. Toda esta actividad está enmarcada en el cumplimiento de la Ley 1448 de 2011”, agregó Padilla.

Felipe Montaño lleva seis meses en la capital vallecaucana, a la cual llegó desplazado de su territorio, cerca de Buenaventura, donde laboraba como pescador. Él ha sido beneficiario de la ayuda humanitaria inmediata que entrega la Alcaldía de Cali y actualmente es una de las personas que ha sido visitada por parte del equipo.

“Me vine corriendo porque me iban a matar, gracias a Dios llegué a Cali y en el CRAV encontré la entidad del gobierno que me ha atendido bien, he recibido bonos de alimentación, aseo y dotación, mientras espero la ayuda por parte del Estado. Gracias a ellos, aquí estoy viviendo diferente, tranquilo, relajado, no vivo temblando de miedo. Ahora quiero conseguir un trabajo, una pareja, rehacer mi vida y buscar la forma de vivir más bien de lo que vivía antes”, dijo Felipe.