Alcaldía y BID avanzan en operación crediticia a favor de metas en proyectos educativos

Con el objetivo de continuar en la preparación de un crédito con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), a través de la Financiera de Desarrollo Territorial (Findeter), para alcanzar las metas en materia de educación propuestas para el cuatrienio, un equipo de la dirección de Hacienda se reunió con expertos y consultores de ambas entidades financieras.

Oswaldo Porras Vallejo, consultor del BID que asistió a la reunión, destacó el avance del proceso y la utilidad del encuentro: “Se entendieron mejor los propósitos de la operación de crédito, se entendió más la situación fiscal de la ciudad y se esbozaron los temas generales que permitirán un mayor fortalecimiento fiscal de la Administración”.

La directora de Hacienda Municipal, María Virginia Jordán, explicó cómo, en los últimos años, las finanzas públicas del municipio dejaron de ser una debilidad institucional para convertirse en una fortaleza.

Durante el período 2013 – 2015, se vivió un repunte del recaudo tributario con un crecimiento promedio del 21%. Con respecto al Impuesto Predial Unificado, ingresaron 1.784 millones de pesos y para el período comprendido entre 2016 y 2019 se esperan recursos adicionales por $78.419 millones. El Impuesto de Industria y Comercio, así como la sobretasa a la gasolina también tienen previsto un crecimiento destacable.

El comportamiento de la deuda también presenta resultados positivos y que confirman el saneamiento de las finanzas. El saldo de deuda disminuyó 67% entre 2006 y 2015. Esto le permite al Municipio liberar espacio para la inversión, mejorar los indicadores de sostenibilidad y aumentar la capacidad de endeudamiento.

Para continuar en el trabajo conjunto del BID con la Alcaldía, en los próximos días el Departamento de Hacienda Municipal entregará al organismo financiero un documento preliminar determinando cuáles son las áreas en las que la entidad podría entrar a dar apoyo a la Administración, en lo relacionado con el crédito.

Paulo Castrillón