Este es el comienzo de un gran sueño que tenemos: Armitage desde la firma de prefactibilidad del tren de cercanías

Con un aporte de $1.700 millones de los $6.160 millones totales que cuestan los estudios de prefactibilidad, la Alcaldía de Cali oficializó su participación en el comienzo del proyecto del tren de cercanías, una iniciativa que ha rondado la cabeza de muchos mandatarios regionales durante las últimas dos décadas y que hoy, gracias a la firma de estos estudios previos, ha comenzado a materializarse.

La firma del compromiso del estudio de prefactibilidad estuvo encabezada por el embajador de Francia en Colombia, Gautier Mignot; la gobernadora del Vale del Cauca, Dilian Francisca Toro; y el director ejecutivo de la Fundación para el Desarrollo Integral (FDI) del Pacífico, Alejandro Eder, con los alcaldes de Cali, Yumbo, Palmira y Jamundí como garantes e invitados de honor.

“Yo creo que esto es el comienzo de un gran sueño que hemos tenido de tener un tren de cercanías. Esto le va a dar a Cali las posibilidades de un desarrollo importante y de conexión con Jamundí, Yumbo y Palmira, por supuesto que sí, lo vemos con muy buena cara. Ojalá lo podamos ver avanzado en esta Administración”, manifestó el mandatario de los caleños, Maurice Armitage.

Eder agregó que el tren de cercanías es una solución novedosa para la movilidad de Cali y de las ciudades vecinas. “Si todo sigue avanzando al ritmo que viene avanzando, para finales de este año deben estar listos los estudios de prefactibilidad, lo que permitiría que para el año entrante ya tengamos la factibilidad del tren. Esto es clave porque significa que para enero de 2020 ya van a estar listos todos los papeles y todo lo que se necesita para poder arrancar la construcción del tren”, aseveró.

Como se recordará, el tren de cercanías es un proyecto que comprende un tramo de 65 kilómetros, pasando por los municipios de Jamundí, Cali, Yumbo y Palmira, con una variante que va hasta el aeropuerto. Es una alternativa de transporte moderna, eficiente y sostenible medioambientalmente, pues se prevé que funcionaría con energía eléctrica y no con combustibles fósiles.

Por lo pronto, en lo que respecta a Cali, anotó Armitage, lo más importante es comenzar a recuperar las zonas por donde iría el tren de cercanías. “Esos terrenos inicialmente no son nuestros. Son de la ANI y tenemos que conversar con ellos para poder tenerlos y poder liberar esas zonas. Mientras no tengamos esas zonas libres, será difícil avanzar. Es un trabajo complejo. Estamos haciendo un llamado a la ANI para que nos ayude y también un llamado a los invasores, que entiendan que esta zona no les pertenece”, indicó.