¿De dónde vienen los Gestores de Paz y Cultura Ciudadana que vemos en las calles de Cali?

El inicio de esta estrategia tuvo lugar en 2016, cuando varios sectores de la comunidad caleña le pidieron al alcalde, Maurice Armitage, un proyecto que les permitiera acceder a oportunidades de ingreso y nuevas posibilidades para mejorar sus condiciones económicas y el bienestar de sus familias. Atendiendo esta solicitud, para inicios de 2017, la Alcaldía de Cali, a través de la Secretaría de Paz y Cultura Ciudadana, dispuso la formulación e implementación de un proyecto dirigido a responder el llamado hecho por la ciudadanía, dando origen a la estrategia de Gestores de Paz y Cultura Ciudadana.
 
Aunque el proyecto se había iniciado efectivamente en 2016, con la implementación de un grupo de gestores de apoyo a la movilidad, lo hecho en esta primera fase dejó varias lecciones aprendidas para plantear un trabajo que incluyera, además de la generación de ingresos, un acompañamiento psicosocial y un plan formativo para las personas que se vincularan como gestores, de manera que la intervención comunitaria cobrara un alto sentido de apoyo para la superación de la vulnerabilidad, en lugar de presentarse como una alternativa asistencialista.
 
De allí nació la semilla de los Gestores de Paz y Cultura Ciudadana, una estrategia orientada a potenciar las capacidades de las personas participantes del proyecto, basada en la orientación profesional, la gestión de oportunidades y el establecimiento de una ruta dirigida a la integración dentro del mundo laboral, a través de un plan formativo que fortalece los aspectos familiares, personales, productivos y ciudadanos de las personas que toman la decisión de replantear sus proyectos de vida para contribuir al progreso del municipio.
 
Actualmente, más de 500 Gestores de Paz y Cultura Ciudadana llevan mensajes que fomentan el buen comportamiento, sembrando valores cívicos en territorio, por medio de jornadas de retribución social que se desarrollan a diario en las calles de las comunas y los corregimientos de Cali.
 
Ya son más de 2725, las intervenciones realizadas por los Gestores entre el 2017 y el 2018, llegando a un gran número de caleños y caleñas para incentivar el cuidado del medio ambiente, la movilidad segura y sostenible, y la resolución pacífica de conflictos.
 
Cabe resaltar que el éxito de este proyecto también se hizo posible gracias al apoyo de la cooperación internacional y la articulación con entidades gubernamentales de nivel nacional. Gestores de Paz y Cultura Ciudadana es una estrategia que se desarrolla entre la administración del alcalde Maurice Armitage, la Agencia para la Reincorporación y la Normalización (ARN), la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) y la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).
 
Ana Durán Salvatierra, Jefe de Misión de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) señaló que “para la OIM es importante apoyar los esfuerzos de los territorios, en la generación de oportunidades para sus ciudadanos. En esta iniciativa han participado hombres y mujeres que residen en Cali, que tuvieron que vivir en un contexto de violencia, pero que hoy contribuyen en la construcción de ciudad con un enfoque preventivo, humano y de reconciliación”.
 
Durante año y medio los ‘Gestores de Paz y Cultura Ciudadana’ con el acompañamiento de la Alcaldía de Cali, han hecho parte de un proceso único e innovador, que los ha invitado a un cambio de vida radical. La estrategia contribuye al desarrollo humano y social, desde la prevención de la violencia y la reconciliación, a través de tres componentes: acompañamiento psicosocial, construcción de planes de vida y jornadas de retribución social a la ciudad.
 
Larry Sacks, director de USAID en Colombia expresó que "la seguridad ciudadana es uno de las más importantes apuestas que tiene USAID en Colombia en la actualidad. El modelo de Gestores de Paz que lidera la Alcaldía de Cali logra mitigar los riesgos que enfrentan personas en alto riesgo de vulnerabilidad y promueve de esta manera la seguridad y la cohesión social en las comunidades”. 
 
“Adicionalmente, la apropiación de los modelos de reintegración para jóvenes que han sido reclutados por grupos armados ilegales adaptada al contexto local, es un ejemplo claro de sostenibilidad en las políticas públicas y efectiva colaboración entre las diferentes instancias del estado colombiano. Aplaudimos esta iniciativa y nos enorgullecemos de ser socios en su implementación" agregó el directivo.
 
Identificación poblacional, no territorial
 
Desde el punto de vista de la intervención social, la estrategia contiene requisitos y mecanismos novedosos para seleccionar sus beneficiarios, dando lugar a la garantía de transparencia en el proceso de vinculación y la adecuada focalización de los recursos hacia las poblaciones más vulnerables; dos características de gestión pública que han derivado en la figuración nacional e internacional del proyecto por su alcance e impacto en la disminución de la violencia, y la generación de espacios efectivos de reconciliación comunitaria.
 
Los grupos a beneficiar se identifican de acuerdo a sus necesidades y sus potencialidades para superar la vulnerabilidad, a esto se suma la vinculación de aliados estratégicos que remiten a los hombres y mujeres que se vinculan como Gestores de Paz y Cultura Ciudadana. Este es cada uno de los grupos a los que va dirigida la estrategia, y la entidad aliada que los selecciona y remite para su vinculación:

Es así como esta apuesta de innovación social logró integrar excombatientes de grupos armados ilegales, ex pandilleros y víctimas del conflicto armado para hacer pedagogía de paz y fomento de cultura ciudadana en diversos escenarios de interacción social, tales como las estaciones del MIO, pasos peatonales, instituciones educativas, parques e incluso ríos.
 
“Este es un programa determinado a beneficiar a quienes realmente lo necesitan, desde esa lógica se estableció, por instrucción del Alcalde, una distribución para que en el desarrollo de la estrategia convergieran estas tres poblaciones, pero este era un ejercicio que no podíamos hacer en solitario, por eso integramos validadores y entidades que remitieran a quienes entran al grupo de Gestores, con el objetivo de garantizar, con transparencia, que cada una de las personas que ingresan, efectivamente se encuentre en un contexto de vulnerabilidad y merezca esta oportunidad de impulsar su proyecto de vida a través del acompañamiento psicosocial, el plan formativo, la retribución social y el desarrollo productivo”, indicó Rocío Gutiérrez Cely, secretaria de Paz y Cultura Ciudadana de Cali.
 
Esa es la historia detrás de la estrategia; administración municipal, cooperación internacional, sector privado y organizaciones civiles en función de mejorar las condiciones de vida de la ciudadanía con más riesgo y vulnerabilidad. Se espera que en 2019 la estrategia siga cambiando las vidas de más familias en los territorios de inclusión y oportunidades, priorizados por el gobierno de Maurice Armitage.  

Mauricio Fernando Muñoz Ospina