Agentes de tránsito salvan vida de norteamericano que sufrió pre infarto en la calle 5

“Hace unas semanas tuve un pre infarto que me obligó a salir de mi casa a buscar ayuda. A pocos metros de llegar al centro médico, colapse y me desmayé, justo al lado de una agente de tránsito que me salvó la vida”. Estas son las palabras con las que George Vince, un ciudadano estadounidense, agradece la ayuda oportuna que le prestaron tres agentes de tránsito que se realizaban labores de regulación en la calle 5 de Cali, justo cuando su organismo hizo un evento cardiaco.

Se trata de los agentes Paola Vargas, identificada con el número 639 y sus compañeros Lorena Caicedo (626) y Alejandro Mosquera (358), quienes, sin dudarlo, auxiliaron al ciudadano extranjero, trasladándolo inmediatamente en la camioneta de uso oficial de la Secretaría de Movilidad hasta el centro médico.

“El señor venía bajando las escaleras del puente de Comfenalco. Cuando lo vi, la primera impresión que tuve realmente fue pensar que venía borracho. En ese momento, le digo a mi compañera y mientras él termina de bajar los escalones, me queda mirando con una cara como quien dice ¡ayúdeme!”, narró la agente de tránsito, Lorena Caicedo.

Después de ser atendido y de ser dado de alta, George Vince se acercó a las instalaciones de la secretaría de Movilidad para agradecerles y rendirles un reconocimiento a las personas que lo auxiliaron. Como él, cientos de visitantes y de habitantes de Cali cuentan con un Cuerpo de Agentes de Tránsito dispuesto a hacer Cali una ciudad segura en la vía y a la vez con gran sentido humano y capaz de ofrecer apoyo en cualquier situación.

“El médico me dijo que si se hubieran demorado unos minutos más en llevarme al hospital yo no estaría contando la historia. Quiero dar las gracias a estos tres agentes que sin escatimar un segundo me ayudaron y me acompañaron hasta que mis allegados llegaran. El buen servicio se da cuando aportamos lo que se espera de nosotros, y pasa a ser un servicio excelente cuando haces un poco más de lo que se espera y ellos hicieron precisamente eso, dar un poco más y es gracias a ellos que estoy con vida, recuperándome”, expresó George Vince, con lágrimas en sus ojos.

El día a día de los 622 agentes de tránsito que trabajan en las calles de Cali, no transcurre exclusivamente circunscrito a las normas del Código Nacional de Tránsito. Su labor en las vías tiene claro el componente humano, y en ese sentido, siempre hacen su mejor esfuerzo, más aún cuando se trata de salvar vidas.

“Nosotros estamos para servir a la comunidad independientemente quién sea la persona, dónde sea y a la hora que requiera de nuestros servicios, vamos a estar ahí. Ser agente de tránsito es un orgullo”, concluyó el Agente de Tránsito, Alejandro Mosquera.

Un cuerpo de agentes desarmados, que desde 1973 son aliados en la vía, facilitando que los ciudadanos lleguen al lugar preferido por todos, el hogar. 622 agentes de los cuales, 72 son mujeres, 3 son supervisoras, quienes día a día, bajo el inclemente sol o la lluvia, procuran la seguridad de todos los actores de la vía.

Durante la reunión de agradecimiento, el subsecretario de Servicios de Movilidad, Ricardo Herrera, mencionó que “este es el día a día de los agentes de tránsito; es importante conocer el lado humano de ellos, gracias a sus buenas acciones”.