Colombia no puede perder esta oportunidad de paz: Alcalde Maurice Armitage

Así fue la participación del mandatario de los caleños en el foro Colombia 2020 de El Espectador.

El alcalde de Cali, Maurice Armitage, instaló este lunes el conversatorio ‘Verdad y justicia, claves para la reconciliación’, organizado por el periódico El Espectador, junto a la Embajada de Alemania en Colombia, la ICTJ y la Pontificia Universidad Javeriana.

“La construcción de paz no depende de la firma del acuerdo, requiere de procesos de perdón y reconciliación que permitan volvernos a ver, a encontrarnos con los que antes nos agredieron”, señaló el mandatario.

En la instalación estuvieron también el director de El Espectador, Fidel Cano; el embajador de Alemania en Colombia, Michael Bock; y el rector de la Pontificia Universidad Javeriana de Cali, el padre Luis Felipe Gómez.

“Más que un momento, el de la justicia será un proceso. Los procesos de reconciliación reconstituyen la confianza como elemento de cohesión social. Nuestra reconciliación es con los demás, con el medio ambiente y con Dios”, dijo a su turno el religioso.

Armitage se refirió sobre la importancia que tiene Cali como ciudad-región receptora de víctimas y excombatientes en el Suroccidente del país, especialmente de las poblaciones del norte del Cauca.

“Apostar a una visión de Cali ciudad-región en el Suroccidente colombiano, equivale a comprender las dinámicas de convivencia entre población víctima del conflicto armado, personas que han dejado las armas, y otras poblaciones vulnerables que han sido afectadas por el conflicto y que se reasientan en nuevos territorios de la ciudad, con necesidades de acceso a los servicios públicos ofertados por la Administración Municipal”, indicó el Alcalde.

“En Cali conviven actualmente más de 190.000 víctimas del conflicto armado registradas y alrededor de 1.500 personas desmovilizadas en proceso de reintegración. Sin embargo, la ciudad creció como un lugar de inmigrantes o desplazados de diferentes olas de violencia desde los años 50. Por tanto, quizá no hay caleño que no haya vivido las consecuencias de conflicto armado”, concluyó Armitage.