Fortalecimiento de las IE rurales con proyectos pedagógicos productivos pertinentes.

Pensar una apuesta que contemple la problemática compleja histórica y territorialmente de la ruralidad, educación rural y escuela para el Municipio de Cali, implica tomar en consideración el complejo entramado y leer las formas como el país ha pensado el desarrollo rural y la educación rural desde un punto de vista político y formativo a nivel nacional.

Uno de los puntos más álgidos de esta discusión queda apalancado al hecho de que las políticas públicas nacionales desde hace varias décadas han agudizado las brechas y la inequidad entre las formas de desarrollo y planeación territorial entre lo urbano y rural, desconociendo la predominancia del territorio nacional de vocación rural.

En el marco de Mi Comunidad es Escuela, se abre una sana discusión de cómo acompañar y pensar la Educación Rural y las instituciones oficiales rurales por una apuesta de valoración territorial, reafirmación identitaria y proyecto vital para la comunidad, los niños y los jóvenes que convergen en territorios que colindan o que hacen parte del territorio rural del municipio. Anudado a este interés, se toma como punto de partida, los esfuerzos de la SEM para formar y acompañar las instituciones desde el modelo Escuela Nueva para responder a la diversidad y singularidad de las formas de vida. En este sentido entonces, el acompañamiento a las IEO Rurales ha considerado tres frentes robustos en los fines que se propone el Programa:

1.- Revisar y reconocer discursos y experiencias educativas devenidas del concepto de nueva ruralidad para Latinoamérica y las formas que ha estado apalancado a políticas de desarrollo sostenible y sustentable para la región.

2.- Restituir las relaciones escuela-comunidad, que posibilite una mayor adherencia de los jóvenes y la comunidad a un proyecto vital con posibilidades auténticas de participación e inclusión en la vida social y económica de la región.

3.- Acompañar a las IEO Rurales a repensar horizontes formativos y currículos más abarcadores que adscriban y contemplen problemáticas territoriales en su propuesta pedagógica y didáctica, en consonancia con las prácticas culturales y de desarrollo sostenible para la región.